No sé si he hecho bien o mal, pero lo he hecho con el corazón así que ni me planteo que puede estar mal. ¿Por qué somos así? No quiero plantearme futuros ni escapatorias. Sigue siendo absurdo que me veas hecha un brote de lágrimas y continúes dudando si de verdad merezco la pena. Escribo lo que se desliza por mi mente, a veces incluso escribo lo que llega en forma de flash a las profundidades de mi alma, surcando los mares de mi sangre. Pero yo estaba hablando de ti, eres alguien con quien sólo se puede estar un rato. Alguien un día me dijo, amaría estar con una persona que cada día me escribiera lo que tú le escribes a él. Jamás lo apreciaste, nada en realidad te agradaba. Tan sólo a ratos te deslumbraban las carreteras de mi cuerpo, curvas infinitas que invitaban a ser conducidas por alguien como tú. En realidad, tan sólo dejaba que tú me rozaras, y cataras mis labios con el ímpetu con el que me llegaban las estocadas de tu aliento siempre que entrabas en mí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario