Así, con la soltura de quien lleva cien vidas vividas, me hizo el amor; mas me besó con la ineptitud del recién nacido que sólo sabe que ha venido al mundo para llorar.

11 julio 2012

Olvidas y recapacitas y de repente, aparece de nuevo, con su curiosa forma de caminar y su característica voz que te hace enloquecer. Piensas y descubres que por arte de magia os habéis vuelto a unir, sin saber cómo y por la fuerza del destino volvéis a compartir sonrisas. Un día, ocurre de nuevo, el reloj marca la hora exacta y todo ocurre muy deprisa pero de manera semejante a como pasó en aquel entonces... Las cosas no son iguales ni mucho menos, y aunque ya todo es distinto los sentimientos que hicieron que cada día me revoloteara una sacudida de seres mágicos por el interior de mis entrañas, no han desaparecido, sino que se están alimentando, noto como crecen cada segundo que pasa, noto su deseo de romper mi piel y volar libres, centelleantes por el entorno, dejando tras de sí una estela de sueños e ilusiones capaces de quebrantar el temor, la desconfianza y la pérdida.

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